Líneas rectas, colores sobrios, pocos detalles decorativos... Son algunas de las características más importantes del estilo minimalista.
El estilo minimalista busca solo lo esencial de un espacio. Fuera todo lo que no sea estrictamente necesario y mayor presencia para lo que usamos diariamente. Este estilo es ideal para las cocinas pequeñas, porque ayuda a que la cocina gane sensación de amplitud. El fregadero bajo encimera aumenta esa amplitud visual.
Una cocina minimalista presenta estas pautas, con líneas puras y simples, pocos objetos a la vista, y unos colores neutros colocándole el broche a la decoración. El ambiente que se respira en este tipo de cocinas es de confortabilidad y paz, sensaciones muy propias de esta filosofía de vida.
Tenemos que huir de las cocinas llenas de muebles, accesorios, pequeños electrodomésticos, etc. Esto no quiere decir que no tengamos todos esos elementos, pero tienen que estar escondidos en los armarios.
Igualmente hemos hablado de los tonos neutros propios de las cocinas minimalistas. La base de estos espacios deben ser estos colores sobrios como el blanco o el gris. Para añadirle personalidad y que la cocina no luzca fría, introduce toques de color violeta, índigo, beige o incluso tonos madera En este caso se ha introducido además una encimera de piedra natural para aportar mayor calidez a la estancia.
Recuerda que en la decoración minimalista priman las líneas rectas, se huye de tiradores y la ausencia de ostentaciones.
